Tiempo libre y vida social: ¿Y si se queda embarazada?

“Últimamente la veíamos un poco rara, como muy preocupada y distante… algo le pasaba. Al final pude hablar con ella, preguntarle y me lo dijo: estaba embarazada. La verdad es que en ese momento  se me vino el mundo encima y no sabía qué decirle, en el colegio dieron una charla sobre estos temas, incluso en casa lo hablamos una vez pero al final pasó. ¿Y ahora qué hacemos?.”

Saber qué hacer en este tipo de situaciones es algo muy personal y decidir una cosa u otra va a depender mucho de las personas que se enfrenten a ella pero recordad que formáis una familia en la que todos y todas sois importantes.

Tu hija o hijo sordo. Son momentos difíciles para todos y todas, situaciones inesperadas que hay que afrontar de una manera o de otra en las que tomar decisiones de gran trascendencia, y en especial para vuestra hija o hijo sordo.

• También está asustado. ¡Claro que sí! Está implicado en primerísima persona y aunque pueda parecer que mantiene una actitud de cierta inconsciencia sabe muy bien que es una situación importante.
• Se siente culpable. Sabe que lo que ha pasado se podría haber evitado y la sensación de tener la culpa aparecerá inevitablemente.
• No sabe qué hacer. Son muchas las dudas que le asaltan y no sabe qué hacer: qué consecuencias traerá, qué decisión tomar, qué dirá mi familia y amigos, etc.
• Necesita ayuda. En el fondo es muy probable que se sienta solo ante esta situación y necesita que sus seres cercanos, su familia, le apoyen y le ayuden a tomar decisiones.
• Era un embarazo deseado. Si bien no es lo más habitual en embarazos a estas edades, puede ser que vuestro hijo o hija en realidad quisiera tener descendencia o quela noticia del embarazo se haya vivido con alegría e ilusión.

Vosotros, papás y mamás. Tampoco es una situación fácil para el resto de la familia y también aparecen multitud de sentimientos que os desestabilizan.

• Culpabilidad. En este tipo de situaciones la culpabilidad suele aparecer en las personas implicadas, son inevitables y hasta cierto punto normales. El problemas es quedarse atascado en estos sentimientos y que no os dejen avanzar y poner en marcha los cambios que sean necesarios para adaptaros a esta situación y tomar decisiones.
• Desesperación. Puede que la noticia de un embarazo no deseado en vuestra hija o hijo adolescente os supere y lo que os apetezca hacer es llorar, enfadaros, regañarle, etc. Es algo muy habitual y comprensible, no deja de ser un signo de que vuestra cabeza está intentando aceptar lo que está pasando. No os sintáis mal por llorar, también vosotros y vosotras necesitáis soltar tensión.
• Preocupación. Queréis lo mejor para vuestra hija o hijo sordo y tenéis miedo por las consecuencias que esto puede traer a su vida:“¿Será capaz de responsabilizarse?” “¿Su hijo o hija será también sordo?” “¿Le educará bien?”, etc.
• Sentimientos contrapuestos. Pensáis que vuestro hijo o hija no está preparado para ser padre o madre pero también os hace mucha ilusión  aumentar la familia y ver crecer al que sería vuestro nieto o nieta.

¿Y ahora qué hacemos?

Lo primero es intentar mantener la calma y no pensar en culpables o dónde se produjo “el fallo”. Lo importante ahora es ver entre todos qué opciones existen y valorarlas con vuestro hijo o hija.

• Afrontar la situación y responsabilizarse del futuro hijo. Es una de las opciones que, como ocurre con otras decisiones, ha de ser valorada en su globalidad: provocará muchos cambios en la vida del futuro padre y la futura madre, cómo se mantendrá económicamente la nueva familia, desempeñar el rol de padre o de madre no es fácil y requiere un gran compromiso, etc. pero también vendrá  una nueva vida a este mundo de la que todos y todas disfrutaréis viéndole crecer.
• Interrupción del embarazo. La interrupción voluntaria del embarazo está regulada por ley. Informaos de la ley vigente y habladlo entre todos.
• Dar el bebé en adopción. Al igual que las opciones anteriores también tendréis que valorar los “pro” y los “contra” que lleva consigo, como podría ser, por un lado, tener sentimientos de culpa y sensación de abandono o futuro arrepentimiento, etc. y por otro lado proporcionar a hijo o hija un futuro más próspero, entre otros.

Hablan las familias...

No sé si habremos tomado la decisión acertada

Es imposible tener la completa seguridad de que se ha tomado la decisión correcta, no solo en estos casos, sino en otros muchas situaciones con las que os encontráis en la vida. Informaos bien con vuestro hijo o hija de las opciones que tenéis y apoyaos mucho mutuamente, entre todos será más fácil.

Es sorda, no está preparada para esa responsabilidad

Ser sordo o sorda no tiene por qué estar relacionado con estar preparado o no para asumir esta responsabilidad. Ser padre o madre no es fácil y se necesita cierto nivel de madurez que muchos adolescentes, sordos y oyentes, no tienen todavía. Si se decide seguir adelante con el embarazo y asumir ese reto vuestro hijo o hija necesitará mucho apoyo de los que estáis alrededor, no porque sea sordo o sorda, sino porque es muy joven todavía y tendrá muchas cosas que aprender.

No teníamos que haberle dejado tantas libertades

Como ya habéis visto antes es normal buscar “culpables” o ver en qué momento se produjo algún error: ¿fue falta de información?, ¿no le explicamos bien las cosas?, ¿dejadez por nuestra parte?, etc. Muchas son las dudas que os vienen a la cabeza y es totalmente comprensible. Muchas veces es difícil saber cuál fue la causa de llegar a esta situación ya que son muchas las cosas y las circunstancias que influyen, ahora es el momento de poner todas vuestras energías en pensar en la decisión más adecuada y en apoyaros unos a otros.

Al ser sorda supongo que nosotros decidiremos por ella...

Tener un hijo o una hija es algo muy personal y una decisión muy importante que le concierne al futuro padre y a la futura madre. Lo importante es que sea una decisión razonada y que cuente con el apoyo de su familia y amigos y amigas. Que vuestra hija sea sorda no quiere decir que no pueda tomar decisiones como cualquier otra adolescente.

Son unos irresponsables, dicen que quieren tenerlo

Sea cuál fuere la decisión que se tome ha de ser razonada y después de valorar lo que implica esa decisión. En el caso de que decidan tenerlo han de saber que esto acarreará: se acabó salir de fiesta como antes, habrá muchos más gastos, tendrán a una personita a su cargo, etc. pero también han de saber que si después de todo quieren hacerlo, aunque él y ella serán su padre y su madre, vosotros y vosotras estaréis allí para apoyarle.

Nos reunimos con la familia del chico para hablar sobre el tema

Recordad que este embarazo estáis implicados todos y todas y también el padre del futuro bebé. Es necesario que os escuchéis y podáis hablar y compartir lo que pensáis y lo que sentís, y recordad que vuestros hijos son los principales implicados y no pueden estar al margen en este proceso. Es importante que participen de verdad, expresando lo que quieren, lo que sientes, etc. y entendiendo todo lo que habléis en estas reuniones.

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