“Nos dimos cuenta de que, aunque llevara audífonos, cuando le hablábamos de espaldas no nos hacía caso o no entendía bien lo que decíamos”.
Para que os mire cuando está de espaldas, para decirle cómo se llama ese juguete al que apunta con el dedo o para contarle el cuento que tanto le gusta es necesario aprender unas sencillas pautas. Serán pequeños cambios para grandes resultados. ¡Vuestros niños y niñas lo agradecerán!
Ahora estáis aprendiendo que no le podéis hablar desde la otra habitación o llamarle mientras corre, y que hay que ser más expresivos. Son pequeños cambios que tenéis que hacer para que la comunicación sea mucho mejor, independientemente de si lleva audífonos, implantes cocleares, hable o signe.
El esfuerzo os compensará en cuanto les veáis su cara de felicidad. El contacto visual, que os mire antes de decirle o signarle algo, será el punto de partida para poder decirle todo eso que queréis. ¿Cómo conseguirlo?
Cuando vuestras niñas y niños sordos están jugando y les decís algo mientras juegan, hablando o con signos, no les va a llegar todo lo que le estáis diciendo. ¿Por qué? Porque aunque tengan sus audífonos o su implante coclear, para ellos y ellas es importante veros la cara, la expresión, el movimiento de los labios… Es decir, que haya contacto visual. Así que lo primero que vamos a aprender es a llamar su atención de la mejor de las maneras y en cualquier situación.
Mamás y papás
Tras recibir la noticia de que vuestra hija o hijo es sordo habéis tenido que cambiar algunas cosas, adaptaros a otras… Estos pequeños cambios para favorecer la comunicación que ahora son un poco nuevos terminaréis haciéndolos de forma casi automática. Es sólo cuestión de tiempo así que mucho ánimo, estamos convencidos de que lo vais a hacer fenomenal.
Ahora que ya habéis captado su atención podéis decirle o signarle todo lo que queráis. Es importante que ahora que vais a contarle un montón de cosas lo hagáis considerando la alternancia de la mirada. ¿Queréis descubrir la mejor manera de comunicaros con vuestras niñas y niños sordos?
¿Qué ha aprendido?
Le estáis dejando tiempo para que reciba toda la información: que vea su muñeco y luego le contáis una historia, que estudie en su mesa y sepa cuándo queréis decirle algo o que estando de espaldas sepa que ha venido alguien.
De esta forma os estáis asegurando de que le llegue toda la información, algo que le da seguridad. Son pequeños cambios que marcan la diferencia.
Cortar el filete, tomarse la sopa… son situaciones donde es fácil que no haya contacto visual. Si mientras está partiendo el pescado hablamos o signamos en la mesa perderá esa información. Esta situación se puede remediar si antes damos unos golpecitos en la mesa. De esta forma vuestra hija o hijo no se perderá eso que estabais contando tan interesante.
Todas estas formas de llamarles y de contarles cosas sirven para cualquier niño o niña con pérdida auditiva. Si sus audífonos o sus implantes funcionan muy bien es estupendo pero no hay que olvidar que para ellos y ellas oír es algo que tienen que aprender. Darles tiempo para prestar atención a todo, darles la seguridad de saber qué pasa en todo momento, etc. son cosas que tienen derecho a disfrutar.
Como pasa con cualquier niño o niña: a veces están tan metidos en su mundo, inventando historias, juegos y descubriendo cómo llevan comida las hormigas que aunque les estéis llamando no os harán caso. Esto no significa que no funciona lo que acabamos de ver sino que por su edad están más pendientes de otras cosas. Paciencia y darles su tiempo son las claves, como con cualquier niño o niña, sordo u oyente.
Y porque no solo mamá y papá le vais a contar muchas cosas sino que también lo hará su abuela, el tío, su hermana… es importante que toda la familia sepa estas formas de llamarle y de cómo dirigirse a ellos y ellas. Es una manera de que todos hagáis un pequeño esfuerzo: vuestra hija o hijo sordo hace un esfuerzo por entenderos y toda la familia hace un esfuerzo poniéndoselo más fácil al tener cuenta la importancia de la información visual. Lo vais a hacer fenomenal.
A continuación queremos compartir algunas ideas para ir practicando lo que habéis aprendido. Seguro que se os ocurren muchas más situaciones. ¡A poner en práctica todo lo aprendido!
En el apartado de ¿Cómo contarle un cuento? Os explicamos el truco de las 3 c, algo sencillo para recordar lo que acabáis de ver aplicado a los cuentos. Mi hijo de 0-6 años > Divertirse y relacionarse > ¿Cómo contarle un cuento?
¿No te ha quedado claro?
No olvides que puedes consultarnos en el apartado Pregúntanos. Además en la colección de DVD Mi hijo sordo podrás ver aspectos relacionados con las niñas y niños sordos en estas edades.