“Cuando mi hija empezó a traer deberes a casa no sabía muy bien lo que tenía que hacer. ¿Le tenía que ayudar a hacer los deberes o no? ¿Qué es lo que yo tenía que hacer? Cuando ya se iba haciendo un poco más mayor ella sola se ponía a estudiar o a hacer las cosas del colegio y a veces me preguntaba alguna palabra o algo que no entendía. Ahora ya no hace falta que esté encima de ella para que se ponga a hacer las cosas del cole.”
¿Tienes muchos deberes que hacer?
Con la llegada del colegio vienen también las tareas para hacer en casa, lo que popularmente se llaman “los deberes”. Esto también es algo que puede generar ciertas dudas a muchos padres y madres: ¿Cuál es mi papel? ¿Qué tengo que hacer? ¿Le tengo que ayudar? Cuando vuestra hija o hijo es sordo también puede que aparezcan otras dudas añadidas: ¿Tengo que hacerlo de alguna forma especial? ¿Y ahora cómo se lo explico yo? etc.
Prácticamente las pautas a seguir son las mismas que en el caso de hijos e hijas oyentes. Lo importante es tener claro cuál es vuestro papel y establecer una buena comunicación, echando mano de algunos recursos cuando los necesitéis.
¡Manos a la obra!
Antes de ponernos en marcha en esto del tiempo de estudio es importante que tengáis claro de qué estamos hablando y sobre todo que vayáis teniendo más claro cuál es vuestro papel como padres y madres.
1. Antes de empezar
El papel de padres y madres. El papel que tenéis en este tema es muy importante: crear el hábito de estudio de vuestra hija o hijo sordo. Es la escuela la que se encargará de enseñarle las cuentas, a leer y escribir, etc. pero vuestro papel fundamental será ese: que se acostumbre a estudiar o a hacer las cosas del cole todos los días. Lo importante es tener claro que aunque papá y mamá estén ahí a su lado, el estudio es responsabilidad de los hijos y de las hijas, no de papá y mamá.
Escuela y familia una pareja perfecta. El papel que tiene la escuela en todo esto es también muy importante, no os decimos nada nuevo pero aunque es el colegio el que se encarga de todo lo relativo a “las enseñanzas escolares”, es decir, la lectura, la escritura, las cuentas, la historia, la geografía, etc. la familia sigue siendo muy necesaria. Los maestros y maestras necesitan conocer también cómo se comportan sus alumnos y alumnas en casa, si tienen algún problema para hacer las tareas escolares, si dedican un tiempo todos los días a hacer los deberes, etc. Sin duda, colegio y familia son una buena pareja. ¡No lo olvidéis!
El hábito de estudio. El hábito de estudio se forma igual que otros muchos: la higiene diaria, vestirse, ir al colegio, etc. Es decir, al principio sois vosotros, papás y mamás, los que tenéis estar pendientes pero luego vuestra hija o hijo sordo se acostumbra y “sin darse cuenta” lo empieza a hacer solo. Algo parecido ocurre con el hábito de estudiar, primero os encargaréis de que vaya preparando las cosas, de revisar con él o ella lo que tiene que hacer, etc. para que cuando vaya haciéndose mayor ya no tengáis que estar tan pendientes.
Crear hábitos más que productividad. Muchas veces, padres y madres se sienten un tanto agobiados porque quieren que su hijo o hija aprenda de forma rápida y cuanto más mejor. Eso estaría estupendo pero tampoco sería real. Cada uno tenemos nuestro ritmo de aprendizaje y en la escuela se encargarán de enseñarle a vuestra hija o hijo sordo lo que le corresponda según su edad y necesidades. La colaboración entre el colegio y padres y madres es muy importante y, aunque a veces os pueden dar pautas para trabajar en casa, recordad que vuestra tarea es este asunto es, sobre todo, ayudar para que se vaya acostumbrando a dedicar un tiempo todos los día a las tareas del cole.
La comunicación. Como ocurre con todos los hijos e hijas la comunicación con sus papás y mamás es fundamental. Explicarle lo importante de dedicar un poco todos los días a las tareas escolares, ayudarle a hacer un horario de estudio, a revisar lo que tiene que hacer en el día, etc. son estupendas oportunidades para que papás y mamás ayudéis a crecer a vuestras hijas e hijos sordos y compartáis más momentos juntos. Así es como se crea un buen hábito de estudio.
Mamás y papás
¡Claro que lo estáis haciendo muy bien! Y lo vais a hacer mucho mejor todavía. El momento del estudio en casa será un tiempo más en el que crecer junto a su familia. Con un poco de paciencia seguro que tenéis éxito.
2. Una buena manera de empezar
A continuación os proponemos una serie de pautas para poner en práctica en el momento del estudio y que os pueden ayudar en estos primeros momentos.
Un ambiente adecuado. Es aconsejable que vuestra hija o hijo sordo tenga un lugar en el que se ponga a hacer sus tareas escolares y que sea siempre el mismo. Un lugar de estudio con una buena iluminación, una temperatura adecuada, sin televisión u otras cosas que puedan distraer la atención de vuestra hijo o hija es un buen ambiente de estudio. Además, es aconsejable evitar interrupciones excesivas (el hermano que entra en la habitación, el papá que va repetidamente a ver qué hace, el perro entrando y saliendo, etc.)
Empezar. Los niños y niñas, sordos y oyentes, necesitan tener una hora estipulada en la que hacer las tareas escolares. En la medida de lo posible es importante que se respete esa hora de comienzo. O que sepa que después la comida y de un rato de descanso viene la hora de dedicar a las tareas escolares, así no estará tan pendiente del reloj. De esta manera se podrá organizar más fácilmente y será algo que formará parte de su día a día.
Preparar el comienzo. Antes de empezar y para que el comienzo sea algo progresivo y se “empiece poco a poco” podéis preguntarle si tiene muchas cosas que hacer, mirar las tareas que tiene que entregar el día siguiente, que vaya preparando las cosas que necesite (el cuaderno, los bolígrafos, el lapicero, etc.)
Comenzar por alguna actividad agradable. Ponerse a hacer las cosas del cole no suele ser algo que les apetezca especialmente por lo que una buena idea es que empiece por las que le supongan menos esfuerzo y le apetezca hacer más. Para algunos serán los deberes de matemáticas, para otros los dibujos… Cada niño y niña tienen “sus tareas preferidas”, aprovechadlo para empezar por estas tareas, así no les costará tanto.
Los primeros minutos. Cuando empiecen a hacer sus tareas intentad que no haya interrupciones para que se pueda concentrar y meterse de lleno en su momento de estudio. Una buena idea es que empiece por aquellas tareas en las que no necesite ayuda y dejar para después aquellas en las que necesite que papá y mamá le den una pequeña guía.
Reforzarle.Intentad que al finalizar sus tareas reciba un halago: “¡Muy bien, has cumplido el horario que habíamos acordado!” “¡Ves como al final has conseguido hacerlo solo!”Si además, después de “haber hecho su trabajo” puede bajar al parque a jugar un rato estupendo. Así sabrá que después de haber hecho las tareas escolares le espera algo divertido. Y si algo no ha salido del todo bien, o le ha costado un poco más transmitirle que es una oportunidad para seguir intentándolo y aprender cómo buscar la solución.
¿Qué ha aprendido?
Que es necesario dedicar un ratito a estudiar o a hacer las tareas que han mandado en el colegio.
Que papá y mamá están ahí, apoyándole, y ayudándole.
Qué poco a poco hay que aprender a ser autónomo y responsabilizarse de lo que tiene que hacer para el cole.
Y que hay tiempo para todo, para jugar, para disfrutar en familia, para hacer los deberes, etc.
Hablan las mamás y los papás...
Ya tiene bastante con ir a logopedia
Ir a logopedia, a las revisiones médicas, audiológicas, etc. Las niñas y niños sordos suelen tener algunas “cargas” añadidas que consumen tiempo y esfuerzo de vuestros peques, y también a vosotros, padres y madres. El tiempo del estudio y de las tareas escolares también es importante y, en la medida de lo posible, es aconsejable que no lo pierdan. Así desde pequeños se van acostumbrando y lo incorporarán a su quehacer diario, se irá formando el hábito de estudio.
Normalmente se encarga su padre de esas cosas
Como ocurre con muchas otras cosas, muchas veces papá se encarga de unos aspectos de su educación y cuidado y mamá de otras: uno se encarga del baño, otro de llevarle al cole, etc. También es habitual que uno de los dos se encargue un poco más de las tareas escolares del hijo o de la hija. Aunque esto sea algo normal y habitual tampoco tiene por qué ser algo “exclusivo” de papá o de mamá. Ayudar a que vuestra hija o hijo sordo sea autónomo y se acostumbre a dedicar un rato a los deberes escolares es tarea de los dos y algo que os gustará compartir en familia.
Hace los deberes él solo y luego los comentamos
Que vuestra hija o hijo sordo sea autónomo y aprenda a confiar en sus capacidades es algo que se enseña en cada cosa que se hace en casa; y también el estudio forma parte de ello. Ya desde pequeños se pueden ir acostumbrando a organizarse solos. Para que os podáis hacer una idea, hasta aproximadamente los ocho años necesitan ayuda para organizarse pero pueden ir aprendiendo y ver cómo se hace: ver qué tareas hay que hacer, acostumbrase a una hora de comienzo, a preparar sus cosas, etc.
Todavía es muy pequeño
Aunque sean muy pequeños siempre se puede hacer algo para que vayan acostumbrándose a recordar lo que tienen que hacer para el día siguiente, que os cuente lo que ha hecho en el colegio o que prepare la mochila para el día siguiente. Así se irán acostumbrando a planificar y prepararse para la jornada escolar; los horarios, y calendarios son unos buenos recursos. En el apartado de buenas ideas encontrarás más información para llevarlo a la práctica.
No sé como ayudarle con las matemáticas
No todos los adultos, por el hecho de serlo, tenemos que saber de matemáticas, o de lengua, o de geografía y tampoco saber cómo enseñárselas a las niñas y niños pequeños. Recordad que vuestro principal papel es el de hacer del estudio un hábito aunque si queréis echarle una mano y guiarles en su tiempo de estudio es mejor hablar con el colegio y preguntarles cómo lo podéis hacer y en qué cosas le podéis ayudar. Muchas veces, padres y madres acaban haciéndole alguna vez algún ejercicio o tarea a su hija o hijo. Pensad que el aprendizaje es también aprender de los propios errores y no pasa nada porque no sepa hacer algo, así aprenderá cómo hacerla y para la próxima vez ya lo hará bien. No olvidéis que una buena comunicación con el colegio de vuestra hija o hijo sordo será vuestra mejor aliada.
Quiere ver la televisión
La televisión y las tareas escolares no son incompatibles. Aunque dedicar un tiempo al cole es importante también lo es que jueguen, se diviertan y disfruten de lo que tienen alrededor; lo que se necesita es un poco de organización: hay tiempo para todo. Una posible forma de facilitarlo es que primero hagan los deberes y después vean un ratito la televisión o jueguen y se diviertan. Así no les costará tanto y se darán cuenta de que hay tiempo para todo.
Hacer un horario de estudio. Al igual que tiene un horario para el colegio también podéis hacer juntos un horario de estudio. Es decir, poner en un papel, por ejemplo en forma de tabla, la hora a la que se pondrá a estudiar o a hacer las tareas escolares, incluyendo en el horario las posibles actividades extraescolares que tuviera, el rato en el que ir a ver a la abuela o salir a jugar a la calle, etc. Dependiendo de la edad que tenga, el horario será más sencillo o no, y también podéis incluir el tiempo de la merienda, el del baño, etc. Podéis ayudaros con dibujos o pegatinas para que al principio lo entienda mejor. Incluir una foto de la abuela, un dibujo de una bañera, o de un cuaderno le ayudarán mucho en los primeros momentos.
Calendario. Además de un horario de estudio también es muy útil utilizar un calendario en el que poder anotar cuándo tiene algún examen o algún ejercicio especial, cuando tiene días de vacaciones, los días que tiene actividades extraescolares, las fiestas del colegio (Carnaval, Navidad, fiesta del patrón o patrona del colegio, etc.) En este caso también podéis utilizar imágenes, fotografías, dibujos de los signos, etc. Para que sea más fácil para todos y todas.
Preparar para el día siguiente. Que se sepa organizar y que se planifique va a ser tan importante como que sepa hacer lo que le manden en el cole. Si se acostumbra a apuntar en el cuaderno lo que tiene que hacer en casa y entregar al día siguiente le facilitará mucho que sea responsable con las cosas que tiene que hacer.Y de la misma forma, también será importante que revise al acabar sus tareas si queda alguna por hacer y los libros y cuadernos que necesitará para el día siguiente. Ser responsable y adulto es algo que se va aprendiendo poco a poco y luego seguro que en cole le va mucho mejor.
Mantener contacto con el colegio. Como ya os hemos indicado anteriormente la comunicación con el colegio es algo fundamental: mantenerse informado de la marcha de vuestra hija o hijo sordo, para peguntar qué tenéis que hacer papá y mamá en casa para complementar lo que hacen en el cole, etc.
Revisar. Otra de las tareas de los padres y madres es “revisar” el trabajo de sus hijos e hijas. El objetivo no es tanto revisar si han hecho correctamente las tareas sino corroborar que se ha cumplido lo que antes vuestra hija o hijo sordo ha acordado hacer, es decir, si ha hecho todos los deberes que tenía que hacer, si ha cumplido el horario de estudio, etc. Por ello también puede ser necesario preguntar antes qué tareas tiene que hacer. Aunque ya hemos dicho que no es bueno que haya muchas interrupciones no está de más que de vez en cuando entréis para ver si está aprovechando el tiempo. No olvidéis aprovechar para decirles lo contentos que estáis porque esté estudiando o porque esté aprovechando el tiempo.
¿No te ha quedado claro? No olvides que puedes consultarnos en el apartadoPregúntanosAdemás en la colección de DVD Mi hijo sordo podrás ver aspectos relacionados con las niñas y niños sordos en estas edades.